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Características y ejemplos de un contrato Joint Venture

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Características y ejemplos de un contrato Joint Venture

Características y ejemplos de un contrato Joint Venture
Características y ejemplos de un contrato Joint Venture

Antes de centrarnos en desarrollar las características y ejemplos de este tipo de contrato, debemos responder a la siguiente pregunta:

¿Qué es un joint venture?

Un joint venture o empresa conjunta, se da cuando dos o más empresas deciden unir sus recursos para crear una nueva entidad empresarial con el objeto de desarrollar un nuevo proyecto o negocio.

El joint venture es una entidad propia e independiente de los demás negocios de las partes que lo forman. Es necesario destacar que, esta asociación no compromete la independencia jurídica de cada uno de sus miembros, es decir, de las empresas, personas u organizaciones que la forman. Solamente les une una finalidad comercial. Esta unión o asociación busca obtener las mayores ganancias posibles para sus miembros, siendo responsable cada una de los miembros de las pérdidas y costes asociados con la misma.

Mientras dure el tiempo de colaboración, los miembros del joint venture tendrán que trabajar en una misma dirección, colaborando y compartiendo el equipo de trabajo, los costes, la responsabilidad y las inversiones. Para que este tipo de asociación dure, entre los miembros debe existir una compatibilidad en la organización, además tanto las aportaciones como los futuros beneficios serán repartidos de forma equilibrada entre los miembros.

El joint venture suele darse entre empresas que pertenecen al mismo sector y complementen sus recursos entre ellas, aportando cada una la experiencia que tiene sobre el proyecto o negocio que están desarrollando.

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Los joint ventures que por lo general tienen más éxito, son aquellos en los que la asociación entre los miembros se da al mismo porcentaje, es decir, si la asociación se da entre dos empresas, cada una de ellas tiene el cincuenta por ciento.

Con independencia de la estructura legal utilizada para la creación de los joint ventures, que pueden asumir cualquier tipo de estructura legal, los miembros de rigen por el acuerdo suscrito entre los mismos, en que se establecerán sus derechos y obligaciones.

En dicho documento se exponen de forma concreta los objetivos del joint venture, así como las aportaciones iniciales de los socios, la responsabilidad frente a las posibles pérdidas y el derecho a los beneficios.

Características del joint venture

El joint venture puede estar conformada por dos o más empresas, que deben compartir recursos, errores y beneficios a partes iguales. Dichas empresas conservan su independencia, trabajando de forma autónoma y manteniendo cada una su imagen y marca.

En el acuerdo se fijan los derechos y obligaciones de cada una de las empresas que lo conforman, especificando las asignaciones de cada una. El acuerdo puede ser de tipo societario o contractual, es decir, puede surgir una nueva sociedad o un contrato.

Se convierte en una nueva entidad, separada de sus fundadores. Esto también implica que la responsabilidad de los miembros se limita al capital invertido.

El joint venture no es una estructura permanente, ya que se puede disolver cuando los objetivos fijados ya han sido cumplidos, o cuando cualquiera de las partes o ambas ya no están conformes con los objetivos, o desarrollen nuevas metas, o cuando el tiempo acordado para el desarrollo del mismo haya expirado entre otros.

Los joint ventures son ventajosos para reducir los riesgos cuando se busca la entrada en nuevos mercados y por el hecho de compartir recursos y gastos a la hora de emprender estos proyectos. En ocasiones, las grandes empresas  deciden  formar un joint venture con empresas más pequeñas con el fin de adquirir la tecnología o la propiedad intelectual de forma más rápida.

El joint venture solo será efectivo si existe una verdadera voluntad por parte de sus miembros de avanzar juntos, ya que los contratos firmados llegan a carecer de valor si la confianza mutua entre sus miembros y la aceptación de los términos fijados en los mismos no están presentes. Los riesgos de realizar este tipo de operación son fáciles de evaluar, yendo desde la pérdida del dinero invertido, a la entrega de tecnología o propiedad intelectual entre otras.

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Ejemplos de joint venture:

  • Sony-Ericsson: ambas compañías trabajaban en la fabricación de equipos de telecomunicación, a principios de la década de los 2000 se asociaron con el objetivo de generar mayores ventas de teléfonos móviles y lograr ser líder en dicho sector a nivel mundial. Actualmente la empresa pasó a ser propiedad exclusiva de Sony.
  • Nokia y Siemens: estas dos grandes empresas decidieron unirse en el 2007, con el fin de hacer frente a los fabricantes de telefonía asiáticos, que realizan los productos mucho más baratos. En 2013 Nokia compró la parte de Siemens.
  • Bosch y Finish: la marca de electrodomésticos está asociada desde hace años con Finish, especializada en productos de limpieza para electrodomésticos, liderando el mercado con su asociación.
  • Kellogg y Wilmar: Kellogg Company concerto un acuerdo de joint venture con Wilmar International Limited, con el fin de vender y distribuir alimentos con cereales en el mercado chino. Kellogg aporta a esta unión una amplia gama de productos y su experiencia en la industria, mientras que Wilmar aportó su infraestructura de comercialización en China con su red de distribución y cadenas de suministro.

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Alba Sacido
Miembro del Departamento de Derecho Mercantil

17/03/2020

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