Modificaciones estructurales en las compañías: La apuesta por el desarrollo externo
Para facilitar la comprensión de posteriores publicaciones y a modo de introducción, nos centraremos en el concepto e implicaciones del desarrollo externo de una empresa o grupo de empresas como opción para el fomento del crecimiento empresarial.
Como política de crecimiento las compañías pueden optar por fomentar su desarrollo interno o apostar por el desarrollo externo mediante la adquisición, participación, asociación o control de una empresa, empresas o activos de otras empresas, extendiendo sus negocios actuales o introduciéndose en otros nuevos.
Este tipo de operaciones conllevan modificaciones estructurales y de tamaño en una o varias empresas, transformando su estructura organizativa y económica, y son generalmente conocidas por su acrónimo en inglés M&A (siglas de Mergers and Acquisitions).
Las empresas suelen apostar por el desarrollo externo frente al interno por motivos económicos pues las operaciones anteriormente enumeradas les permiten reducir costes (mediante la integración de procesos productivos o comerciales complementarios…). La obtención de nuevos recursos y capacidades, sustitución o complementación del equipo directivo o, por ejemplo, la obtención de beneficios fiscales.
También existen otros motivos estrechamente vinculados a los económicos, pues en muchos casos lo que se persigue es entrar en un determinado mercado, industria o país con fuertes barreras de entrada, una reducción del nivel de competencia, etc.
Ventajas del credimiento externo
Las ventajas del credimiento externo se podrían resumir en las siguientes:
- Es una forma más rápida y segura de crecimiento, pues permite disponer de forma inmediata de las nuevas inversiones.
- Permite alcanzar un aumento del poder de mercado si las fusiones o adquisiciones tienen lugar entre rivales directos.
- Es un sistema que ofrece mayores posibilidades de financiación del crecimiento.
Tipos de desarrollo externo
Generalmente las compañías suelen acudir a las siguientes operaciones de desarrollo externo para la obtención del tan deseado crecimiento empresarial:
- Las fusiones de empresas: Dos o más compañías independientes se integran en una sola mediante la transmisión en bloque de sus patrimonios y la atribución a los socios de las sociedades que se extinguen de acciones, participaciones o cuotas de la sociedad resultante de forma que desaparece al menos una de las integrantes.
- La adquisición de empresa: Es decir, la compraventa de paquetes o la totalidad del capital social entre dos o más empresas, sin que suponga la desaparición de las personalidad jurídica de las partes.
- La cooperación o alianzas entre empresas: Es una fórmula intermedia; las sociedades trabajan en conjunto estableciendo vínculos y relaciones entre ellas, pero sin que se produzca la pérdida de personalidad jurídica de ninguna de las participantes, que mantienen su independencia jurídica y operativa (pueden materializarse mediante los contratos de Joint Venture, analizados en anteriores publicaciones).
Según el tipo de relación o integración que se establezca entre las empresas éstas se pueden clasificar:
- Integración Horizontal: Las empresas son competidores entre si y pertenecen a la misma industria
- Integración Vertical: Las empresas están situadas en distintas fases del proceso de explotación o de producción de un producto o servicio.
- Integración Conglomerada: Las empresas tienen actividades muy distintas entre sí, es decir, ni son directamente competidoras ni desarrollan diferentes actividades necesarias para la satisfacción de una necesidad concreta.
Inconvenientes del crecimiento externo
Una vez analizado el concepto de desarrollo externo, sus tipos y ventajas, debemos hacer un breve inciso en los inconvenientes del crecimiento externo:
- En muchas ocasiones suponen un coste de adquisición demasiado elevado debido a la valoración de los activos intangibles de las empresas.
- También suelen suponer la compra de activos innecesarios que van en el “pack”.
- Otras veces, el coste de reestructuración de la empresa resultante hace peligrar la eficiencia de la operación.
- En este tipo de procesos suelen surgir importante problemas de integración de dos organizaciones diferentes.
Para evitar que este tipo de dificultades inherentes a las operaciones de crecimiento externo empresarial puedan terminar obstaculizando el mismo, es recomendable contar con un buen plan estratégico y equipo de asesores que ayuden a las compañías integrantes a prever, afrontar o canalizar este tipo de inconvenientes.
30/05/2017