La importancia de los Depósitos Fiscales Muchos empresarios del sector de hidrocarburos o de bebidas alcohólicas desconocen la existencia o la importancia de los depósitos fiscales.
¿Qué es un depósito fiscal de hidrocarburos o de bebidas alcohólicas?
Para no complicar mucho el asunto diríamos que podría equipararse en parte a lo que en el ámbito aduanero sería una zona franca.
Es decir, un depósito fiscal es una instalación dentro de la cual no se devengan los impuestos que gravan los hidrocarburos o las bebidas alcohólicas, es decir el IVA y los Impuestos especiales que recaen sobre los hidrocarburos y sobre las bebidas alcohólicas.
Por lo tanto, dentro de depósito fiscal (ya sea de hidrocarburos o de bebidas alcohólicas) se compra y se vende sin IVA y sin Impuestos Especiales.
¿Qué supone para las empresas?
Lo que supone para las empresas un depósito fiscal de hidrocarburos o de bebidas alcohólicas es una capacidad financiera mayor, puesto que pueden adquirir las mismas cantidades de producto que adquirían pero a un precio menor puesto que se compra sin impuestos o adquirir por el mismo importe que adquiría mayor cantidad de producto por la misma razón expuesta.
No hay que olvidar que el depósito fiscal puede suministrar a estaciones de servicio (gasolineras), gasocentros, cooperativas agrarias y consumidores finales, tanto gasolina, diesel, o gasóleos bonificados.
No hay que olvidar que el sujeto pasivo del Impuesto Especial sobre los hidrocarburos o las bebidas alcohólicas es el titular del depósito fiscal por lo que siempre será él el responsable del pago del Impuesto Especial que se produzca a la salida del depósito fiscal.
¿Por qué a su vez es importante el depósito fiscal de hidrocarburos o de bebidas alcohólicas?
Un depósito fiscal de hidrocarburos o de bebidas alcohólicas es importante por la capacidad de almacenamiento que permite.
Piénsese que CLH (hoy EXOLUM), el mayor depósito fiscal de España, aplica una política en la que deja fuera de sus instalaciones a todos aquellos que no son Operadores Petrolíferos. De tal forma, todo aquel que tenga producto adquirido, por ejemplo, en la CEE o fuera de la CEE y no sea operador petrolífero tiene muy difícil en España el almacenamiento de ese producto (salvo que tenga un depósito fiscal o pueda alquilar tancaje en un depósito fiscal distinto de CLH).
Desde nuestro punto de vista, los depósitos fiscales resultan incluso interesantes como Plan de Negocio. Resulta una buena idea empresarial crear una red de depósitos fiscales que sean competencia a otros depósitos fiscales y que permitan dar capacidad de tancaje a aquellos actores del sector que no pueden tener dicha capacidad en depósitos como CLH por no ser operadores petrolíferos.
Muchos gasocentro desconocen que tienen, o pueden tener, la capacidad para ser depósitos fiscales de hidrocarburos y gozar de las ventajas del régimen suspensivo, de la mayor capacidad de financiación y poder seguir vendiendo a gasolineras, gasocentros, cooperativas y consumidores finales.
Podemos decir que, en la actualidad, la tramitación de un depósito fiscal de hidrocarburos puede llegar a los 6 meses, mientras que la de un depósito fiscal de bebidas alcohólicas podría estar en 2-3 meses.
Por nuestra parte hemos ayudado a crear múltiples depósitos fiscales, tanto de hidrocarburos como de bebidas alcohólicas, desde su fase inicial. También hemos participado en la transformación de gasocentros a depósitos fiscales.
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Carlos Babot
Experto en impuestos especiales sobre los hidrocarburos
07/03/2023